Para ti mamá: 

Lo que más me gusta del día de la madre son las cartitas que me hacen mis hijos. Pasando de ser algunas rayas a algunos garabatos, hasta llegar a obras de arte y verdaderas cartas de amor. Esas cartas de amor que te sacan las lágrimas. Cartas del amor más puro e incondicional.

El día de la madre es un día para agradecerles a nuestras mamás todo lo que han hecho por nosotros. Agradecerle los desvelos, la paciencia, el cariño y sobre todo, el amor incondicional que nos tienen. A pesar de los errores que cometemos, siempre están ahí.

Seamos honestos, comprar un regalo y empacarlo bonito no basta para demostrar todo el amor que sentimos. A veces lo que esperamos recibir no tiene precio. No se puede comprar.

Qué tal si en este día haces algo especial por ella. Por esa mujer que siempre vela por ti. La compañera y amiga fiel que te ha ayudado toda la vida y daría la vida por ti. Sorprendámosla llenándola de mimos y demostrándole el mismo amor puro que sentíamos de niños. Hagamos que sea inolvidable. Hagámosla feliz.

Qué mejor forma de hacerla feliz que ser el mejor hijo que puedas ser para ella, siempre. El amor se debe expresar cada día, no solo en esta fecha especial.

Les presento varias ideas de cómo demostrarle amor a mamá sin gastar un centavo.

Tiempo:

Pasar tiempo de calidad es un gran regalo. Sin interrupciones, sin ver el celular.

Dale en el gusto y comparte con ella lo que más le gusta. Para mi abuelita, pasar tiempo de calidad es jugar cartas. Cuando era chica, ¡hasta me dejaba hacer trampa con tal de que jugáramos! (muy mal).

Comunícate

Llámala, aunque estés ocupado, dedícale 5 minutos de tu tiempo. Conversa con ella, cuéntale de tu vida, de tus sueños, de tus amigos o pareja. Pregúntale qué piensa, pídele su consejo. Hazla partícipe de tu vida. Nada la hará más feliz que sentirse tomada en cuenta.

Escúchala: Aunque no estés de acuerdo con ella, escúchala. En ocasiones las mamás dicen cosas hirientes o cosas que no queremos escuchar. ¡Lo más increíble es que el 99% de las veces tienen la razón! “Más sabe el diablo por viejo que por diablo”.

Agradece:

No es su obligación darnos todo en la vida. Es importante que les demostremos que lo valoramos. Y parte de ser agradecido en la vida es ser feliz. Las personas felices son las que agradecen cada pequeña cosa que tienen, y si tu mamá te ve feliz, ella será la más feliz. (“ella lo será más” (porque se repite “feliz”).

Paciencia:

Quizás la más difícil. ¡Sobre todo cuando se trata de enseñar a utilizar una computadora o un teléfono inteligente!. Cuando la estés perdiendo, recuerda toda la paciencia que tu mamá tuvo contigo cuando eras chico.

Detalles:

La vida está llena de detalles, y los pequeños detalles hacen grandes diferencias. De vez en cuando llévale su ramo de flores favorita, llévale un rico chocolate o quizás regálale un peinado del salón. Que vea que te acuerdas de ella, que no necesitas una fecha especial.

Ser un buen hijo con nuestra madre es tarea de todos los días. Pero, este domingo sorpréndela con un gran abrazo. Llévale el desayuno a la cama. Dile al oído que la amas, que es la mejor mamá del mundo, y que le agradeces todo lo que hace por ti.

Nunca se es demasiado viejo, ni nunca demasiado tarde para demostrarle a tú mamá que la amas y que aunque a veces no lo demuestres, es importante para ti.